*Editorial
La situación política en México, vive momentos de enorme emergencia, luego de que Nicolás Maduro –presidente de Venezuela-, ofreciera que Petróleos de Venezuela (PDVSA) suministre gas a nuestro país, esto ante los cortes en el abasto desde Texas.
Texas vive una crisis tremenda por las tormentas invernales.
Forbes México, indica que México produce 60% de la electricidad con gas, mayoritariamente importado de Texas por medio de una red de gasoductos. El anclaje de la matriz energética ha vulnerado el sistema eléctrico, afectando a más de 4.6 millones de clientes.
Sin embargo, la propuesta de Maduro podría traer un as bajo la manga, ya que esto le permitiría al dictador venezolano apropiarse literalmente de Petróleos Mexicanos (PEMEX), y por ende encabezar la venezolización en nuestro país.
Las últimas semanas han sido un verdadero caos para el gobierno de #AndrésManuelLópezObrador, pues los cortes de electricidad en los puntos más importantes de la República Mexicana, le han traído un enorme desgaste político.
Muchos ciudadanos comparan la situación con lo que se vive en Venezuela: no hay electricidad, no hay medicinas, existe una estrategia ineficaz para combatir el #COVID, y la inseguridad abarca a todo el país sudamericano…nomás falta que haya escasez de alimentos y que AMLO le declare la guerra al presidente de los Estados Unidos, Joe Biden.
Nicolás Maduro ya tiene pie y medio en México.
Es hora de impedir la destrucción de nuestro país.