EDITORIAL /
La campaña de Xóchitl Zagal, no entusiasma ni siquiera a su equipo de trabajo. La candidata de Morena a diputada federal por el Distrito 7 de Cuautitlán Izcalli, vive una crisis muy importante.
¿Dónde quedó esa Xóchitl Zagal, que recorrÃa las calles, segura de sà misma, confiada, y con pleno conocimiento de causa?
Los primeros dÃas de arranque de campaña, han sido sombrÃos y grises.
El panorama es muy desalentador, y no es para menos, pues no tiene el respaldo polÃtico y social de Daniel Serrano Palacios.
El evento que encabezó Daniel Serrano, el pasado sábado 9 de enero -en la explanada del Palacio Municipal izcallense-, fue solo una muestra de cómo está fortalecida su figura.
Miles de simpatizantes de Morena, acudieron al respaldo de Claudia Sheinbaum. Este logro, por supuesto, se le debe adjudicar al 100 por ciento a Serrano Palacios.
Esto es importante decirlo, porque Xóchitl Zagal, debe saber que si Morena tiene una fuerza importante en el municipio, es gracias al Ãmpetu de Daniel Serrano.
En estos momentos, los nombres de Marko Galindo, Karim Carvallo y Samuel Delgado, aparecen en bardas y espectaculares.
Llama muchÃsimo la atención, que la misma Xóchitl Zagal, aparezca sonriendo en fotografÃas con Marko Galindo y Karim Carvallo, personajes que no tienen un ápice de liderazgo.
¿Sabe Xóchitl Zagal, dónde estaban Marko Galindo y Karim Carvallo, cuando Daniel Serrano, luchaba por hacer de Morena, toda una gran fuerza en Cuautitlán Izcalli?
En el mejor de los casos, estos estaban en la oposición que atacaba y trataba de destruir a Morena. El peor de los casos, mejor ni lo mencionamos.
Ojalá Marko Galindo y Karim Carvallo, le ofrezcan miles de votos a Xóchitl Zagal. El chiste se cuenta solo, porque lo único que le traerán es el desdén ciudadano.
Daniel Serrano Palacios, es el gran lÃder de Morena en Cuautitlán Izcalli, y eso es algo que se debe reconocer y aplaudir, porque la lucha no ha sido fácil.
La campaña de Xóchitl Zagal, no despegará, ni se fortalecerá.
Nadie más que la candidata, sabe por qué su proselitismo, ha fallado.
