Por @luis_journalist
El monstruo de corrupción que crearon Odebrecht y toda la cúpula presidencial priista, está lejos de extinguirse, y mientras más pasan los días, mayores datos se obtienen del mayor escándalo político que ha paralizado a todo México.
Emilio Lozoya -desde la comodidad de su casa donde recibe botellas de vino carísimas-, logró poner en aprietos al sexenio de Enrique Peña Nieto, embarrando también a Carlos Salinas de Gortari, Felipe Calderón Hinojosa, Luis Videgaray, José Antonio Meade, entre otros.
Sin embargo, hay un personaje que no había sido mencionado en el tema de Odebrecht, y que por supuesto nadie imaginaba que pudiera tener una conexión directa o indirecta en el caso. Ese personaje es el gobernador del Estado de México, #AlfredoDelMazoMaza.
En su edición del sábado 22 de agosto, Proceso señala que el Instituto Nacional Electoral (INE), investiga "presuntas aportaciones ilegales a la campaña de Enrique Peña Nieto mediante la empresa Blunderbuss Company de México, las empresas fachada creadas por Odebrecht: Constructora Internacional del Sur y Research Enginnering and Development LTD, así como la suiza Latin America Capital Holding".
En entrevista con el semanario, Alfredo Figueroa Fernández -exconsejero del entonces Instituto Federal Electoral (IFE)-, indicó que de comprobarse las acusaciones de Emilio Lozoya, se podría definir al sexenio anterior como una “Presidencia fraudulenta”.
La revista política más influyente de México, añade que el INE estaría buscando la conexión entre el "modus operandi" de los comicios presidenciales y el de la gubernatura del Estado de México en 2017, donde ganó Alfredo del Mazo Maza, primo de Peña Nieto.
Proceso resalta que en el informe del 12 de febrero de 2020, el INE clasificó la denuncia por “probable aportación de entes prohibidos” contra el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Verde Ecologista de México (PVEM), quienes postularon a Del Mazo Maza.
En este espacio, buscamos a la Coordinación de Comunicación Social del gobierno del Estado de México (vía Twitter), para conocer su postura referente a lo publicado por Proceso. Sin embargo no se logró obtener respuesta, a pesar de que también se etiquetó en el mensaje al mismo gobernador y a Alejandro Ozuna Rivero, secretario general de Gobierno.
Por lo visto, Lozoya desactivó una bomba de expansión masiva, y no midió los alcances de sus acusaciones…y si los midió, entonces lo que él deseaba era hundir a todo un sistema político-financiero-electoral, ese del cual se benefició de manera gigantesca, y al ver que fue abandonado, quiso vengarse de una manera casi brutal.
Del Mazo Maza, no ve la luz al final del camino.
Esperamos la respuesta del gobernador.
Es su obligación ofrecer una explicación detallada.